Juegos de la infancia

Te traigo los mejores juegos que nos llenan de recuerdos, nostalgia y emoción

Salir con los amigos del barrio, llegar a casa lleno de lodo, exhausto de tanto correr y saltar pero con la sensación de poder comerse el mundo entero. Así nos hacían sentir aquellos juegos de nuestra época, donde la tecnología no se necesitaba para divertirse ni para comunicarse. 

Rayuela

Equilibrio, precisión, nos sentíamos todos unos malabaristas jugando a la Rayuela. Con un dado y una tiza, este juego se podía hacer en cualquier zona que se quisiera. Bastaba con dibujar los números del 1 al 10, del infierno al cielo, donde se escondía el triunfo.




Bolitas

Boliches, bolichas, caniques, cayucos, balitas, metras, pingos, pelotitas, polcas, piquis, chibolas, todos tuvimos un nombre para ellas. Incluso muchos ni siquiera se dedicaban a jugar sino a coleccionarlas, con sus formas, sus colores y tamaños, era como tener un universo condensado en cristal.


El elástico

Chicle americano, la goma o como quieras llamarlo. Con cada nivel, el elástico se hacía más alto y aumentaba también la dificultad. En el barrio o en el descanso, todos aprovechábamos para saltarlo.




Piedra, papel o tijera

Definitivamente es el juego que nunca pasará de moda, hasta estudios se han hecho sobre qué opción es la más escogida entre las tres. Nosotros personalmente nos atrevemos a creer que la piedra es la mejor opción en la primera partida, ya que todos escogen tijera y nadie papel. Haz el intento y escribes lo que te resulte en los comentarios.

Teléfono descompuesto 

Un juego de atención, concentración y claridad. Muchas veces nos llegó el mensaje del teléfono roto y aunque no lo entendiéramos muy bien, debíamos pasarlo a la siguiente persona. Lo mejor era descubrir al final quién había roto el teléfono.

La escondida

El clásico de todos los clásicos, jamás pasará de moda. Contar de 1 a 10 e ir a buscar a tus compañeros parecía fácil, pero debías ser rápido en regresar para ganarles «1,2,3 por Juan». Es normal que con el paso del tiempo haya sufrido varias transformaciones, como el «salvo patria», que liberaba enseguida a todos aquellos amigos que ya habías encontrado y atrapado.




Pulseadas

¿A quién no le gustaba probar su fuerza? Siempre había un amigo o amiga (para sorpresa de muchos) que era invencible, y no existía nada más satisfactorio que ganarles a todos los que hacían fila para luchar contigo. Y tú, ¿solías ganar o perder?



¿Y vos qué juegos recordas? 


Fuente: genial.guru

 

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