Supera tus miedos

La completa libertad se logra viviendo sin miedos.


Es más que probable que nuestros miedos solo existan en nuestra mente. Debemos ser valientes y enfrentarnos a ellos para demostrarnos a nosotros mismos que podemos con eso y más.

 Todos hemos tenido miedo en muchas ocasiones. Pero, en nuestra mente, el miedo es algo negativo, algo de lo que hay que escapar y, si se puede, ignorar.
Todo lo que no debemos hacer, lo hacemos. Escapar de nuestros miedos no será nunca la solución.

Intentar escabullirnos de nuestros miedos es la parte “fácil”. Momentáneamente podemos sentirnos libres de ellos pero, tarde o temprano, vuelven a aparecer. Con esta constante, nunca logramos superarlos, sino despistarlos.


Reconoce que tienes miedo


Tenemos un gran problema en reconocer que hemos cometido errores, que no somos perfectos y que tenemos miedo. Nos da vergüenza admitir que lloramos. Hay muchas cosas que callamos, porque pensamos que nos verán débiles o frágiles.

No somos conscientes de que admitir lo que nos pasa nos da poder. Si estoy triste, lloro y lo admito, el dolor pasará antes de lo que pienso. Si lo escondo e intento aguantarlo, este tardará en irse.
Reconocer que tienes miedo es un primer paso para enfrentarte a él.
Piensa que no puedes continuar en ese círculo en el que te ves sumergido. No vas a lograr salir de esos miedos que te abordan si sigues escapando de ellos y fingiendo no tenerlos.
¡Reconócelo! Será un primer paso para dejar de tenerle miedo al propio miedo.
Una vez que reconozcas tus miedos podrás avanzar y enfrentarte a ellos. Piensa que cuanto más tardes en reconocerlo, más tiempo estarás bloqueado y paralizado. El miedo te bloquea y no te permite avanzar. Es el momento de cambiar esto.


Confía en ti mismo



Hay una fábula que cuenta lo siguiente:


Había un ratón que estaba siempre angustiado porque tenía miedo de un gato. Un mago se compadeció de él y lo convirtió entonces en un gato. Pero, entonces, el que era ahora gato, empezó a tener miedo del perro. Tras ser convertido ahora en perro, empezó a tener miedo por la pantera.
El mago, harto, decidió volver a convertirlo en un ratón y le dijo “Nada de lo que haga por ti va a servirte de ayuda, porque siempre tendrás el corazón de un ratón”.
¿Realmente de qué tienes miedo? Quizás el hecho de escapar de tus miedos, de fingir no tenerlos, te ha hecho olvidar qué es realmente lo que temes. Es posible que ese miedo solo exista en tu imaginación, pero como te niegas a enfrentarte a él, persiste.
Tienes que confiar en ti mismo, estar seguro de que puedes vencer cualquier miedo que te aborde. ¿De verdad vas a dejar que pueda contigo? Tan solo es miedo, una simple palabra, una emoción negativa que en ciertos momentos puede tornarse positiva.

Este no es el caso, si vives con constantes miedos en tu vida. Está claro que enfrentarse a un rival tan fuerte no va a ser fácil pero ¿acaso hay imposibles? ¿No te has enfrentado a cosas peores en tu vida?
No tengas miedo. Créenos… Tú puedes con todo esto.


Mira a tus miedos a los ojos.

Hay una tribu de indígenas que enseña a los más pequeños a enfrentarse a sus miedos. Para eso, hacen que se sienten, cierren los ojos e imaginen que una víbora está delante de ellos. Sabemos que los niños tienen mucha imaginación, por lo que se tornará algo real.
Esta tribu les enseña a los niños que cada vez que intentan apartarse de la víbora esta crece, si intentas escapar ¡te persigue! En cambio, si la miras a los ojos, fijamente, la víbora se va empequeñeciendo cada vez más y más.

Hay muchas situaciones en nuestra vida en las que mirar a los ojos a un problema hace que se solucione. Lo mismo pasa con el miedo. Si escapamos, este crece, pero si lo enfrentamos, este disminuye.
Hay que ser valientes, ¡debes ser valiente! ¿Podrá contigo el miedo?
Todo miedo puede ser superado, el problema reside en nosotros. Realmente el miedo es una oportunidad para superarnos a nosotros mismos, para crecer. Mira al miedo a los ojos, pero míralo bien, firme y seguro de ti mismo. Dinos… ¿Dejarás que pueda contigo?
Si lo necesitas, comparte tus miedos con alguien de confianza. Verás que las demás personas también tienen miedo, ¡es algo normal! Pero el miedo, lejos de bloquearnos, nos permite avanzar.
¿Empezamos a correr hacia nuestros miedos? ¿Empezamos a ser valientes?

Fuente: http://mejorconsalud.com


Te recomendamos seguir leyendo:

Deja tu comentario

No se publicará
No se publicará
Whatsapp